No debemos olvidar que todo lo que Hitler hizo en Alemania era legal.
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Antes sin embargo vamos a reproducir un texto insólito: «En el año 1936 se hallaba Alemania en la cúspide de su prestigio internacional. Los Juegos Olímpicos que en aquel año se celebraron en BerIín atrajeron a numerosos visitantes extranjeros ... Ejemplar durante aquellos días fue también la actuación pública de Hitler. Todos los discursos que pronuncio fueron moderados, llenos de fe en la paz y muy amables en cuanto hacía referencia al extranjero. Llego incluso al extremo de estrechar cordialmente la mano y felicitar al vencedor de los 100 metros lisos, el negro Jesse Owens». (Hjalmar Schacht, "Memorias", Editorial Ahr, Barcelona 1954, pag.361 y 362).
Dado que Schacht era ministro con Hitler y además enemigo suyo, un testimonio de esta naturaleza debería ser la prueba definitiva de lo que paso realmente. Pero sin embargo hay que rendirse a la evidencia de que el texto de Schacht es tan falso como los que afirman que Hitler se negó a saludar a Owens. Vamos a conocer la verdad:
«El Presidente del Comité Olímpico Nacional (alemán) VViIli Daume con ocasión de la inauguración en el año 1984 de una calle de Berlín con el nombre de Jesse Owens reitero públicamente la verdad: la recepción de ganadores de la medalla de oro por parte de personalidades políticas de Alemania había suscitado entonces críticas por parte del Comité Olímpico Internacional. Por deseo de su Presidente, Baillet-Latour, se suspendieron otros recibimientos por parte del Canciller del Reich, puesto que a juicio del COl la política y el deporte debían mantenerse estrictamente separados. Por esta causa no hubo "apretón de manos" oficial para Owens». (yorsicht Fäilschung, Dr. Gerhard Frey (Herausgeber) FZ-Verlag GmbH, Munchen, 1991).
«En 1936 se celebraron en Berlín los XI Juegos Olímpicos de verano en los que participaron 51 naciones. Fueron inaugurados por el Canciller del Reich Adolf Hitler el 1.8.1936.
«Uno de los vencedores más destacados entre los participantes olímpicos fue el negro americano Jesse Owens que ganó en Berlín cuatro medallas de oro para los Estados Unidos ... Sobre el deportista negro Owens se expandió en todo el mundo una estúpida mentira en relación a Hitler. Se decía que Hitler se había negado a dar la mano a Owens así como a felicitarle por la medalla de oro.
«Esta falsedad fue reforzada después de 1945 por Baldur von Schirach, antiguo Jefe de las Juventudes del Reich. Tras 20 años de prisión en Spandau publico un libro con el título "Ich glaubte an Hitler" (Yo creí en Hitler) (2). En letra pequeña se puede leer:
"Documentación: Jochen von Lang". Este Lang es un redactor de la revista "Stern" (nombre verdadero Piechorski) que seguramente ha aportado "toda clase de ayuda". Schirach escribe (pag. 217): "La estrella de los JJ.OO. de 1936 fue el velocista Jesse Owens, un americano de color. Cuando Hitler se encontraba en el Estadio, felicitaba a los vencedores en su palco. Cuando Owens ganó la carrera de los 100 metros, Hitler dijo: los americanos deberían avergonzarse al dejar que sus medallas las ganen los negros. Yo no le daré la mane a ese negro".
«Esto es pura imaginación. En realidad en ningunas olimpiadas los Jefes de Estado de los países organizadores ofrecían el homenaje a los vencedores ni colocaban las medallas. Solamente podían efectuar el homenaje el Presidente del COl o un representante designado por el. Cuando desconociendo esta costumbre, Hitler invitaba al principio a los vencedores a su palco para felicitarlos, el Presidente del COl, conde Henri de Baillet-Latour, hizo saber a Hitler que no deseaba tales felicitaciones. Hitler toma debida nota y se atuvo en adelante a tal instrucción. Por ello tampoco recibió después a Jesse Owens ...
« ... En su libro titulado "Blackthink” (3) Owens no ha escrito una sola palabra sobre que se le hubiese denigrado en las Olimpiadas de 1936. Por el contrario, escribe mucho sobre su desgracia personal y su discriminación como negro en los Estados Unidos. Poco antes de su fallecimiento efectuó una expresa rectificación ante la agencia de noticias norteamericana "Associated Press" (AP) (4). En ella confirmó no haber sido discriminado por Hitler.
«Willi Daume, Presidente en funciones del Comité Olímpico de la Alemania Occidental, que había participado en los JJ.OO. de 1936 como miembro del equipo de Baloncesto (5), también efectuó la rectificación en el año 1984 durante un aperitivo ofrecido con ocasión del cambio de nombre de la berlinesa "Stadion-Allee" (Avenida del Estadio) por la de "Jesse-Owens-Allee" (Avenida de Jesse Owens).
«El "cazador de nazis" Simon Wiesenthal* había exigido ya desde hacía años este cambio de denominación en concepto de "reparación" (!) a Jesse Owens. El diario "Die Welt" escribió entonces: "Willi Daume rectifica una antigua leyenda". Naturalmente, Wiesenthal se escandalizó: "De una reparación a Jesse Owens se ha pasado a un rescate de la reputación de Hitler".» (6)
("Richtigstellungen zur Zeitgeschichte", Cuaderno 1. Dr. Heinrich Wendig. Grabert-Verlag. Tübingen).
pd*:Simon Wiesenthal un tipo despreciado por los suyos y cazador de fabulas.