La Piedra de Dashka
En 1995, Alexandre Chuvyrov, Doctor en Ciencias Físicas y Matemáticas, profesor en la Universidad estatal de Bachkirie, en compañía de su estudiante chino Huan Hun decidió estudiar la hipótesis de una antigua migración de los chinos hacia Siberia y Ural. Durante sus expediciones en Bachkirie encontraron varios grabados rupestres en chino antiguo (tratando sobre todo de comercio, bodas y defunciones), que confirmaban su hipótesis.
Durante sus investigaciones, encontraron en el archivo del Gobernador general de Ufa notas del siglo XVIII que relataban la existencia, cerca del pueblo de Chandar en la región de Nurimanov de unas 200 tablillas insólitas de piedra grabada. Otras notas indicaban que en los siglos XVII y XVIII expediciones de científicos rusos en los Urales habían estudiado 200 tablillas blancas que llevaban signos y motivos. Otras notas indicaban que a principios del siglo XX el arqueólogo A. Schmidt también había visto estas tablillas blancas en Bachkirie.
En 1998, Chuvyrov y su equipo comenzaron a investigar pero en vano hasta tal punto que empezaban a pensar que se trataba de una leyenda.
Entonces, el 21 de julio de 1999, Vladimir Kraïnov, ex presidente del consejo local de agricultura, reveló al Pr Chuvyrov la existencia de una tablilla enterrada en su patio.
Una semana después se inició la extracción de la piedra de Dashka para estudiarla en la Universidad de Ufa.
Después de limpiarla, los científicos se asombraron ya que la piedra era un mapa tridimensional.
La piedra, de una tonelada, mide: 1.48 metros de altura, 1.06 metros de ancho y 16 centímetros de espesor.
Se compone de tres capas: La base de dolomita tiene un espesor de 14 cm, la segunda capa tiene la imágen grabada y es de diópsido y se ignora la tecnología de su tratamiento y la tercera capa de 2 mm de espesor es de porcelana de calcio y protege el mapa contra los choques exteriores.