Científicos australianos descubren nuevos 'seres diminutos' en la isla indonesia de Flores
MADRID.- Hace dos años, dos paleontólogos australianos pusieron cabeza abajo a la comunidad científica al anunciar el descubrimiento de una nueva especie humana hasta ahora desconocida: el 'Homo Floresiensis'. Ahora, nuevos hallazgos en la isla indonesia de Flores demuestran que entonces no se encontraron unos huesos aislados, sino que allí, hace 18.000 años, vivió una gran población de estos 'seres diminutos' de apenas un metro de altura.
El descubrimiento, como el anterior, ha sido hecho por el equipo del profesor Mike Morwood, de la Universidad de Nueva Inglaterra, en Armidale (Australia). Los arqueólogos hicieron las excavaciones durante el año 2004 en Liang Bua, en la Isla de Flores, y entre los restos encontrados destacan una mandíbula, húmeros, radios y otros huesos de, al menos, nueve individuos diferentes.
Todos ellos, según publica esta semana la revista Nature, son similares a los encontrados el año pasado, lo que permite a los científicos no sólo asegurar que se trata de más ejemplares de Homo Floresiensis, sino constatar que su extremadamente baja estatura no era por un problema físico del individuo encontrado en 2003, sino porque la especie era muy pequeña.
Tras el descubrimiento de esa primera hembra, hubo científicos que pensaron que no se trataba de una nueva especie humana, sino que podría tratarse simplemente de un pigmeo o un ser humano afectado de microcefalia, cuyos síntomas son un cerebro inusualmente pequeño y a menudo enanismo.
Entonces, los científicos encontraron restos del esqueleto de un solo individuo, que dio nombre a la especie. Pertenecía a un varón adulto de apenas un metro de estatura, capaz de andar de pie y con un cerebro del tamaño del de un chimpancé.
Según los datos recopilados hasta ahora por los científicos, los "seres diminutos" tenían la cabeza pequeña y sin barbilla, los brazos largos en relación al cuerpo, la pelvis en forma de campana y extremidades robustas, parecidas a las de los chimpancés.
Vivían en un mundo poblado por ratas del tamaño de perros, enormes lagartos y elefantes pigmeos; de estos últimos, llamados "Stegodon", se han encontrado restos en una de las cuevas, con marcas de cuchillo.
La nueva especie encaja justo con la extraña fauna extinta de Flores, que fue el hogar de un amplio rango de arcaicas criaturas, extintas en otros lugares, a menudo metamorfoseadas en formas enanas o gigantes: entre ellos se incluye una forma enana del primitivo elefante Stegodon, además de dragones Komoro y aún especies más grandes del lagarto gigante.
La nueva especie de ser humano vivió en un tiempo en el que poblaciones residuales de 'Homo erectus' pudieron haber vivido aún en las cercanías de Java, y en la que la región entera fue colonizada por el 'Homo sapiens'.
Fuente: El Mundo
<center>

</center>
Hallan más restos de 'hobbits' en una isla indonesia
Científicos australianos han hallado más restos de seres diminutos en una isla indonesia, que se suman a los descubiertos hace un año y que los expertos consideran pertenecen a una nueva especie humana.
Según publica esta semana la revista británica 'Nature', los investigadores han encontrado en la isla de Flores una mandíbula y varios huesos de dedos y de extremidades, así como el brazo derecho del ejemplar original, una mujer que habría vivido hace 18.000 años.
El primer hallazgo -parte de un esqueleto que incluía el cráneo que sorprendió al mundo al sugerir la existencia de una especie nueva de ser humano, caracterizada por su pequeño tamaño de menos de un metro de altura.
La pequeñez de esos seres motivó su nombre, 'hobbits', en alusión a los personajes creados por J.R.R. Tolkein en la trilogía 'El señor de los anillos'.
El hallazgo de más restos refuerza la hipótesis de que los seres que habitaron Flores hace menos de 20.000 años pertenecían a una especie hasta ahora desconocida de ser humano.
Habitaron la isla hace menos de 20.000 años
Tras el descubrimiento de esa primera hembra, hubo científicos que pensaron que no se trataba de una nueva especie humana, sino que podría tratarse simplemente de un pigmeo o un ser humano afectado de microcefalia, cuyos síntomas son un cerebro inusualmente pequeño y a menudo enanismo.
Pero el hallazgo de más restos refuerza la hipótesis de que los seres que habitaron Flores hace menos de 20.000 años pertenecían a una especie hasta ahora desconocida de ser humano, con unos rasgos comunes que difícilmente pueden atribuirse a una enfermedad.
'No parece que el crecimiento anormal sea una explicación plausible, ya que el enanismo relacionado con el desarrollo hormonal y la microcefalia que se desarrolla en humanos va acompañada de unos miembros y pelvis de proporciones normales', apunta Morwood en la revista.
Tenían la cabeza pequeña y sin barbilla, los brazos largos en relación al cuerpo, la pelvis en forma de campana y extremidades robustas, parecidas a las de los chimpancés.
Tenían capacidad intelectual
Hace un año se hallaron también en una de las cuevas de la isla indicios de fuego y de fabricación de utensilios, lo que sugiere que los llamados 'Homo floresiensis', pese a su cerebro del tamaño de un pomelo, tenían capacidad intelectual.
Los últimos descubrimientos han tenido lugar en la cueva de Liang Bua, en la misma isla de Flores, e incluyen el antebrazo de un niño que habitó hace unos 12.000 años, así como otros huesos que parecen datar de hace 95.000 años.
Según los datos recopilados hasta ahora por los científicos, los 'hobbits' tenían la cabeza pequeña y sin barbilla, los brazos largos en relación al cuerpo, la pelvis en forma de campana y extremidades robustas, parecidas a las de los chimpancés.
Vivían en un mundo poblado por ratas del tamaño de perros, enormes lagartos y elefantes pigmeos; de estos últimos, llamados 'Stegodon', se han encontrado restos en una de las cuevas, con marcas de cuchillo.
El profesor Daniel Lieberman, de la Universidad de Cambridge, en Massachusets (EEUU), afirma en 'Nature' que 'los hallazgos de Liang Bua son emocionantes, por los interrogantes que plantean', y espera que pueda llegarse a un consenso sobre el origen de los pequeños seres.
En un principio se sugirió que descendían de otra especie humana, el 'Homo erectus', que habría llegado a Flores hace 800.000 años.
Sin embargo, el tamaño de los brazos planteó la posibilidad de que proviniera de una especie más primitiva, el 'Australopithecus', aunque los rasgos generales de esa familia no concuerdan con los de los 'hobbits'.
Si al final resulta que se trata de una especie humana nueva, ello significaría que el humano moderno convivió con otros homínidos hace mucho menos tiempo de lo que se piensa. Los últimos indicios de tal convivencia fue cuando los 'Homo Sapiens' coexistieron en Europa y Asia con los 'Neanderthales' hace 35.000 años.
Fuente: Terra Actualidad - EFE